jueves, 24 de enero de 2013

Abel Pintos:el artista más convocante de la historia del Festival de Cosquín


Por Eugenia Guzmán.-

Desde la tarde se podia anticipar lo que sería la quinta luna coscoina, inolvidable.

Abel Pintos volvió a confirmar que su talento, su entrega, su humildad y grandeza artística son auténticos y su público lo mimó nuevamente batiendo record histórico en la Plaza Próspero Molina-. 15 mil personas dijeron presentes para ovacionar al joven artista.

TESTIMONIO

En Conferencia de Prensa, Pintos manifestó: ´No creo que el cien por ciento de convocatoria deba atribuirse a un solo artista, este festival es de por si convocante, todos los que vienen a compartir su propuesta tienen su público y tal vez muchos de los que están esta noche ni me han sentido nombrar´, fiel a su humildad, recordó a Mercede Sosa, León Gieco y destacó la presencia de Víctor Heredia en el escenario.

UNA NOCHE INOLVIDABLE

Una hora de show fueron suficientes para que el artista de más de 15 años de carrera, confirmara su historia de amor y admiración con un público que se encargó de retribuirle con gritos, aplausos, baile y hasta ´pogo´, cada interpretación realizada.

Promediando la noche, mas precisamente a las dos y media de la madrugada, la plaza se veía repleta de gente ansiosa por el artista principal de la programación. Sus seguidoras gritaban sin cesar, Abel Pintos se hacia presente con look urbano, sombrero negro, jean, remera y camisa abierta. Fresco, dinámico, atractivo, dulce y por sobre todo real.-

Fuente:  http://www.terraviva.com.ar/noticias.php?IdN=2353&Localidad=7

Abel Pintos hizo historia en el Festival de Cosquín


El joven cantautor se presentó esta madrugada consiguiendo un lleno histórico de la Plaza Próspero Molina. En un show impecable en lo sonoro y en lo emotivo, puso todo lo que tiene en calidad vocal y expresividad.


Cantó todos sus éxitos y otros temas que ya forman parte del cancionero popular. Abel Pintos provocó un temblor de gritos en la Plaza Próspero Molina que vivió, según los organizadores del Festival del Folklore, una noche histórica con lleno total de sus instalaciones.

El joven cantautor, surgido cuando era un niño en la década de 1990 en esa misma plaza, agradeció el afecto de sus fans y del público mayor que también coreó sus temas.

Fue después de las 2 de la madrugada. La plaza estalló cuando apareció en escena quien es hoy el máximo referente de la música popular argentina en cuanto a convocatoria. Con una banda que no tuvo fisuras, Abel Pintos mostró profesionalismo y manejo escénico descubriendo una nueva forma de mostrar la música popular a las nuevas generaciones. Más atractiva, menos acartonada y sobre todo, de mucha calidad.

Lo precedió el español David Palomar quien conmovió a todos los presentes con una interpretación magistral de canciones de Chavela Vargas y una versión españolizada de Los ejes de mi carreta, de Atahualpa Yupanqui.

martes, 22 de enero de 2013

“No me encierro en ningún género musical” (Revista El Federal)

A los 28 años se consolida como un artista libre, con un estilo propio en donde confluyen varios géneros y un tratamiento desprejuiciado de ellos. Estrena un disco con aires electrónicos de sus temas clásicos y habla de todo: el folklore, el cruce de ritmos, su estrategia para vender discos y sus ganas de escribir un libro.
Victoria Bazán sube a la camioneta de papá y apoya sus tres añitos a pata ancha. No pone condiciones usuales para el paseo. Ni caramelos ni juguetes ni globos coloridos. Tiene una ante la cual no declina, sino rompiendo en llanto: sólo pasea con papá si en el estéreo suena Aventura o Cactus, sus canciones favoritas. “Poné Abel, papu”, le pide Vicky a papá Víctor, quien, derretido, sube el volumen y tararea con ella alguna de las canciones de Abel Pintos, un artista que atravesó diagonalmente generaciones y géneros hasta hacer nacer eso que puede conocerse como el “estilo Abel”.

Todo está en vos. Llega con la cabeza hundida en una capucha, el paso apurado y el ceño apretado por una garúa que se congela en el aire de Buenos Aires y tarda en caer, como en una escenografía de película londinense. Puntual, simpático, pide un sándwich que se pierde en un matorral de hojas verdes que lo acompañan y, mientras bebe licuado de frutilla, naranja y jengibre con azúcar, habla. Porque Abel Pintos, además de cantar con fervor, habla con fervor. “Estoy cumpliendo 15 años de carrera discográfica y, al mismo tiempo, estoy en pleno crecimiento. Eso me genera una situación muy armónica: tengo el aplomo del que vivió muchas cosas y la inquietud del que sabe que todavía adolece de mucho conocimiento. No soy un adolescente en la vida, pero sí en la música. Este disco significa parar la pelota. El éxito que fue creciendo disco tras disco se fue dando de manera paulatina, a medida que yo me iba desarrollando como persona y como artista”, suelta.
Con “Reevolución”, su disco más popular, su convocatoria se reafirmó en una geografía popular: su nombre se hizo número puesto en los festivales y sumó público al que ya tenía. “Para ellos hicimos un resumen de estos 15 años. Pero no quería un disco de catálogo, sino un trabajo que marque un crecimiento.” Habla de “Sueño Dorado”, bautizado con el nombre de la primera canción que Abel escribió. “Tendríamos que haber hecho un disco doble para meter todas las canciones que signifiquen mucho para mí y para mi público. Quisimos
hacer un balance para el público nuevo y, al mismo tiempo, aportar canciones para los que me siguen.”

Con principio y sin final. Es difícil saber si éste que lo tiene andando por el país es el mejor momento de su carrera. No porque no se sepa qué hay detrás, sino porque Abel es un artista sin techo y entonces uno corre el riesgo de repetir el lugar común dentro de un tiempo. Es, eso sí, un momento de rica cosecha. Porque hubo semillas sembradas.
El sueño de todo compositor es algo similar al suceso que lo tuvo como protagonista hace unos años. En La Rioja, una provincia que siempre lo recibe con butacas llenas y alto fervor. Abel cantó Tu voz. Y la gente también; más fuerte que él. “Me quedé helado: fue muy fuerte esa sensación, tanto que la volví a cantar en el mismo show. Ahí nació una costumbre: una canción fundamental de mis discos, abren y cierran el concierto.”
-¿En dónde está lo popular? ¿Se lo puede palpar en que la gente cante tus canciones?
-Lo popular está en que uno pueda crear canciones y generar una música que identifique a la parte del pueblo que elige acompañarte en tu música, porque yo creo que todos los músicos son populares.
-Pero es un acto íntimo la composición, un momento en que uno se arranca algo sin mirar a la gente, sin saber si eso va a ser realmente compartido.
-Está bien, pero todo lo que sucede en el mundo, lo bueno y lo malo, es mucho. Pero las raíces son pocas. Los músicos diversificamos de manera diferente. Yo canto al amor desde mi lugar y vos desde el tuyo. Pero ambos cantamos al amor. Nace de un impulso íntimo la canción, pero también nace desde ese lugar en que nos conectamos todos más allá de las diferencias. En los conciertos, me emociona que durante dos horas miles de personas que no nos conocemos podamos conectarnos con las mismas historias, con las mismas canciones.
-Es un punto común, misterioso.
-Es un punto sobre el cual se diserta mucho en las canciones, en los poemas, en el arte en general, en la religión, en la espiritualidad. Pero me parece interesante que no se pueda llegar al origen.

Crece desde el pie. Se recuerda de niño escuchando a Ignacio Copani, a Johny Tolengo, a Roberto Carlos, a Carlitos Balá. Escucha Foo Fighters, José Luis Perales, TV on the Radio, Joaquín Sabina, Zero Seven, Joan Manuel Serrat. “No hay ningún género musical que
no me guste. Soy un tipo muy pasional y desde ese lugar hago mi música. Todo corre paralelo a lo que esté viviendo. En algún momento de la vida, cuando tenga más historias que contar que preguntas por responderme, tal vez mis discos sean más parecidos entre sí, como los de Perales. Hasta que llegue ese momento, van a ser muy distintos uno del otro. Por eso el tema de los géneros me tiene sin cuidado no me encierro en ninguno de ellos.”
Música escucha todo el tiempo, casi siempre en su teléfono móvil. Aprovecha los tiempos en los hoteles y compra discos por Internet: tiene una biblioteca. “Voy en búsqueda de cosas nuevas. Mi hermano -Ariel, guitarrista de la banda, socio en las canciones- me hace conocer mucha música o Fabricio Rodríguez (armoniquista, líder de la banda Mr. Mojo), un amigo, que también me pasa música.”
La explicación a tamaña apertura está en la patria de todos: la infancia. Sus hermanos, 8 y 11 años mayores que él iban a recitales cuando Abel no había empezado a afeitarse. Ese fue el primer golpe de suerte; de ellos bebió In Utero, de Nirvana, escuchó canciones de Metallica casi hasta romper los vidrios de la casa. Pero también se conectaba con la tierra. Su padre, que tocó la percusión en un disco suyo, cantaba folklore. Cuando creció el perfil se le definió: conoció a Mercedes Sosa. “Ahí se me terminó de abrir el mundo, porque encontré emocionalmente lo que escuchaba en todos los géneros: una síntesis de todo”. Descubrió que podía enloquecer con un sólo de la viola de Metallica o emocionarse con Un son para Cándido Portinari. “Ahí descubrí el amor por la música”, revela. A los 9 años le dijo a sus padres que si escuchar a Mercedes lo hacía feliz, ese era su mundo. Pero antes debió andar un camino. Papá vendía transformadores y disyuntores en la calle y su madre, además de ama de casa, limpiaba en casas de familia. Sus hermanos trabajaban en una empresa de transporte y entonces Abel se quedaba todo el día solo en casa y los padres querían para él una ocupación. La altura lo obligaba al básquet, la habilidad al fútbol. Pero mamá no tardó en saber que el niño no tenía su fuerte en el deporte. “Yo quiero cantar”, se plantó. Fueron al conservatorio, pero la opción no era viable: una familia de clase media no lo podía pagar. Entonces encontró un coro gratuito. Y empezó.
-El tuyo es un género propio que sintetiza el eclecticismo, pero tiene una esencia personal, ¿creés que tu forma puede animar a otros a componer desde un completo desprejuicio?
-No creo que sea a partir de mí. El folklore siempre permitió eso: tuvo muchos momentos de renovación. Hace 40 años cuando irrumpió Cuchi Leguizamón o Daniel Toro hacían algo distinto a lo que se escuchaba en ese momento y hoy la música de ellos es tradicional. Lo mismo pasó con Raúl Carnota, Chango Farías Gómez, Peteco Carabajal.

Abel lee libros en papel. “No soporto leer en pantalla.” Estudia guitarra, lee varios libros al mismo tiempo, sin distinguir entre cuento y novela y entre ensayo y literatura. En la sobremesa lee un cuento, pero también lee mientras viaja. Le gustaría haber escrito “Mi planta de naranja lima”, del brasileño José Mauro de Vasconcelos, el primero que leyó en su vida, que lee una y otra vez y vuelve a emocionarse. “Es el más certero a nivel emocional”. La misma emoción que provocan sus palabras, su voz y su música en los tres años de Victoria.




Fuente: http://revistaelfederal.com/nota/revista/24891/no-me-encierro-en-ningun-genero-musical

miércoles, 16 de enero de 2013

Disco Nacional más vendido del 2012


DISCO NACIONAL MÁS VENDIDO DEL 2012 - "Sueño Dorado" fue consagrado como el Disco Nacional Más Vendido del 2012, según el ranking anual de CAPIF, la Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas. No es de extrañar, ya que el nuevo material de Abel Pintos fue número uno en ventas en iTunes Argentina y logró Disco de Oro a una semana de su lanzamiento y Disco de Platino en sólo tres meses de venta, realizando más de 43 conciertos en 5 meses.

domingo, 13 de enero de 2013

Abel Pintos: Uno es parte de una fiesta que es de la gente (Entrevista)


Abel asegura que los festivales siempre le dan posibilidad de tocar por primera vez para mucha gente, y eso lo estimula.

“Estar entre los números centrales, en cualquier festival, es un verdadero privilegio –explica Abel Pintos al teléfono desde Malargüe–. Para los organizadores de festivales es siempre complicado administrar los tiempos de cada artista, sobre todo cuando está la tevé. Vivo con mucha felicidad la popularidad que me permite disponer de más tiempo con el público, pero más allá de eso siempre fue un placer y un honor ser parte de los festivales de la Argentina, independientemente del tiempo”. Sin embargo, Abel agrega que poder contar con más espacio le permite ofrecer “un show mejor articulado, poner en juego distintos climas y llevar al público lo más cerca posible de una situación de concierto”.

Tras un 2012 que lo afirmó definitivamente, con un disco en el que repasa su discografía con nuevas versiones y un ritmo vertiginoso de presentaciones en vivo, Pintos es sin dudas uno de los artistas más taquilleros de la temporada, pero además uno de los más personales. Acaso por eso es de los más esperados en esta edición de Jesús María.

–¿Qúe presentarás de tu disco “Sueño dorado”?

–Normalmente en las fiestas populares y los festivales suelo hacer un repaso de mis discos y Sueño dorado es un repaso de 15 años de carrera discográfica que se cumplieron el año pasado, por lo que conceptualmente podría estar todo. Cada uno de mis discos tiene un carácter determinado, independientemente de que haya continuidades e hilos conductores que han ido delineando mi estilo. Por eso, a la hora de presentar distintos momentos de discos variados, se acentúa la necesidad de marcar climas y espacios distintos.

–¿Qué te gusta más de los festivales?

–El carácter del público. La gente está en un relax total y no vino sólo a escucharte a vos. En todo caso uno es parte de una fiesta que es de la gente. Uno es el forastero. No es como cuando tocas en un teatro, que la gente vino a escucharte a vos.

–Igual hay mucha que te sigue y esta noche irá al festival por vos.

–Sí, es cierto, pero también hay mucha que ni sabe que estoy. Lo lindo de los festivales es que te dan la posibilidad de tocar por primera vez para mucha gente. Eso me estimula muchísimo.

–¿Qué virtud resaltarías de Jesús María?

–Es uno de los grandes festivales del país y tiene mucha mística. No es que uno va a tocar sólo a un festival multitudinario que se transmite por TV. Uno va a una fiesta que es parte de la historia de la música popular argentina. Jesús María está por cumplir 50 años: medio siglo de músicos populares argentinos. Es una escuela, yo crecí escuchando Jesús María.

Pintos cuenta que el año pasado hizo dos giras de conciertos paralelas, por lo que para este anuncia, después del trajín festivalero del verano, una pausa creativa. “En 2012 por un lado tocamos en festivales y fiestas populares el repertorio de Reevolución –explica– y por el otro presentábamos Sueño dorado en teatros y estadios. Hicimos 150 conciertos en un año y además sabíamos que nos esperaba una temporada intensa de festivales. Y así es: a fines de marzo serán 50 los conciertos del verano. Por eso desde un comienzo dijimos que entre abril y agosto no saldremos a tocaren vivo. Tomaré un descanso y empezaré a preparar un nuevo disco que saldrá en octubre”.

Abel Pintos está de regreso (Entrevista)



Abel habla de su próximo álbum, del Barloa, de los vinos mendocinos y de su contacto virtual con sus fans, a quienes les sorteará cada libro que termine de leer 

- ¿Y te han gustado algunos vinos mendocinos?

- No soy un catador muy específico pero he probado muchos vinos mendocinos, especialmente el malbec y he visitado varias bodegas.

- ¿Cómo te preparás para una gira de 50 conciertos en tres meses?

- Hago una preparación física previa, una especie de concentración (risas). Son muchos conciertos en pocos meses y los encaro con muchas expectativas porque, entre otras cosas, vamos este año a visitar varios lugares por primera vez y a volver a otras ciudades que hace tiempo que no visito y en las cuales tengo recuerdos muy lindos.

- Después del súper cover "Cactus", de Cerati, ¿te picó el bicho para reversionar otro tema de rock?

- Hay muchas canciones que me gustan del rock como para poder interpretar alguna vez, sin embargo siempre digo que no me gusta hacer una versión simplemente por hacerla. A veces siento que otra canción de otros autores podría complementar mejor el concepto de alguno de mis álbumes, eso ocurrió con "Cactus". Tengo una larga lista de temas de otros autores que estoy seguro que el tiempo los va a acomodar solos cuando haga falta.

-¿Y cómo viene el próximo disco?

-Estoy escribiendo las canciones, estoy pensando en el diseño de producción, también en el concepto del audio. También estoy pensándolo para sacarlo de gira, porque todos estos elementos conforman un todo, están siempre muy relacionados. Por otro lado, hasta ahora sé que lo vamos a editar este año aunque no creo que sea antes de octubre.

-Te vi en un video subido en un famoso blog socialista de Chávez. ¿Qué tanto te sorprende el alcance de Internet para ampliar y proyectarse?

-El fenómeno de Internet me genera una sensación de libertad muy grande en el sentido de que siento que todos los artistas del mundo tenemos la posibilidad de llegar de forma más inmediata a lugares impensables. Siento que hoy más que nunca es muy posible llegar al mundo entero, hablando del tema de la difusión, específicamente. Esto no quiere decir que esté de acuerdo con la descarga ilegal de música, pero sí creo que internet es una herramienta de difusión muy importante, incluso una herramienta de venta, pero siempre dentro de los marcos legales y el respeto de todos los que participan en el proceso de producción de un disco o de un espectáculo.

Dicho oportunamente, Abel es uno de los cantantes jóvenes que más interacción tiene actualmente con sus seguidores en las redes sociales. Diariamente sube tanto a Facebook como a cuenta de Twitter, expresiones de su pensamiento, sus ocurrencias durante las giras, recomienda libros y aplicaciones y comenta sus gustos y sus canciones. Hace unos días, ha prometido sortearle a sus fans los últimos tres libros que ha terminado de leer: "La montaña mágica" de Thomas Mann y dos de Haruki Murakami; "De qué hablo cuando hablo de correr" y "Tokio blues".

-¿Cómo se te ocurrió eso de que estás sorteando libros?

-Leo mucho y creamos un hashtag en Twitter llamado "literaturasi", donde un grupo de personas subimos las frases de los libros que estamos leyendo que más impresión nos causa. Y se me ocurrió que, siendo una persona que no se apega demasiado a las cosas materiales, decidí que cuando termine de leer un libro lo iba a regalar por internet. En realidad, todavía no he sorteando ninguno porque quiero encontrar una forma, un sistema, que ayude a la persona como incentivo a la lectura. El objetivo es impulsar la lectura. De allí a entregar en los próximos días los libros de Thomas Mann y de Haruki Murakami.

-¿Cómo surgió la idea de cantar con tu padrino en la Costa Atlántica?

-En realidad León y yo trabajamos en la misma productora, "Dharma Producciones" y le habíamos propuesto hacer una fecha en la Costa Atlántica por separado y terminamos al final programando una juntos. Hace mucho tiempo que no compartíamos un mismo escenario y nos pareció que estaba bueno esta vez. Él viene con un disco súper interesante y yo con un momento especial. Tenemos un lazo de cariño muy profundo.

viernes, 11 de enero de 2013

Se cumplió el "Sueño Dorado" de Abel Pintos

El autor y cantante llegó y recibió a la prensa. Con su característica humildad dijo no sentirse responsable de los más de 18 mil espectadores de la noche. "Mi sueño dorado es este, el que estoy viviendo y los momentos que vendrán."


Jesús María 2013: Con León Gieco y Abel Pintos, primer lleno total


León Gieco y Abel Pintos militan el folklore cercano al pop y al rock, pero lograron sumar suficientes espectadores para el primer lleno total de la 48ª edición del Festival de Doma y Folklore, por encima de las noches de Jorge Rojas, Los Tekis y el Chaqueño Palavecino.

En la séptima noche, el festival ensayó un enroque de figuras en el tándem Gieco–Pintos y le cedió a este último el cierre para la trasmisión televisiva y la posibilidad de que la juventud se adueñe de la noche, en otra jornada con un calor sofocante y húmedo, pero sumamente festivo.

La temperatura en el campeonato de jineteadas sigue alta porque ninguno quiere quedarse afuera y la pelea por la punta es monumental. El único que parecía haber sacado una pequeña luz de ventaja era en la categoría Crina limpia el actual campeón Ricardo Pucheta que aventajaba por 13 puntos al segundo. Había que ver cómo le iba con el reservado "El Intocable" de Vega, antes de declarar que el bicampeonato estaba casi asegurado. En Gurupa y Bastos, escasos puntos separan a los líderes y está todo por verse.

La apertura fue de León, que subió a tocar a las 21.13 cuando las plateas no estaban llenas para desandar todo su repertorio folk. Clásicos como El fantasma de Canterville, La colina de la vida, En el país de la libertad, y una monumental versión de Malas condiciones. En tevé se dedicó a los temas del multipremiado El desembarco para terminar con Pensar en nada, El ángel de la bicicleta, y De igual a igual y llevarse la primera ovación.

Abel, la gran estrella. Pintos fue el encargado de cerrar la jornada (quien lo hubiera dicho hace algunos años, tocar después de su propio padrino León) para el delirio de su enorme grupo femenino de fans que no pararon de corear su nombre y en especial las letras de las canciones. En el player, mirá un fragmento del show.

Con el corte de entradas, el orden de las noches en cantidad de convocatoria queda así:
1- Jueves con León Gieco y Abel Pintos: 18.500
2- Sábado con Jorge Rojas: 14.500
3- Lunes con Los Tekis y Facundo Toro: 13.500
4- Martes con el Chaqueño Palavecino: 13.000
 5- Miércoles con Cacho Buenaventura: 9.900 entradas.
6- Domigno con Piñón Fijo: 8.700
7- Noche inaugural del viernres: 7.800

Abel Pintos, el nuevo dueño de los suspiros femeninos


Amparado en su versión como compositor y eligiendo los mejor de sus discos Sueño dorado (2012), Reevolución (2010), y La Llave(2007), Abel Pintos de despachó ante la multitud en Jesús María con un show de una hora y cuarenta minutos durante la madrugada del viernes donde no faltó ni un solo suspiro femenino.

Y para que no hubiese dudas sobre su posicionamiento entre esas preferencias, las chicas cantaron y corearon desde el minuto uno cuando arrancó con la seguidilla Quién pudiera, El beso/quisiera, yLa llave en el menos eléctrico de los formatos que puede presentar Pintos. Es el nuevo crooner de la canción romántica que no escatima ternura en sus versos y pone los dedos en V para declararse en paz, amor, y amparado en su fe en Dios.

Además logró colar en las preferencias del nuevo cancionero folk algunos temas que podrían encuadrar en el ítem “una que sepamos todos”. Es el caso de No me olvides, Bella Flor, Tu voz, Sin principio ni final, o Revolución que sirvieron para dejar sentado que, además de una voz increíble, hay repertorio y mucho trabajo a lo largo de la última década.

 

jueves, 10 de enero de 2013

” Abel” deslumbró a unos 5.000 Malargüinos



Abel pintos;Para unas 5.000 personas, se subió al escenario “Asencio Villar”, y generó una “revolución” durante una hora y media de show, en lo que se constituyó hasta el momento, en el show de mayor convocatoria de esta edición de la Fiesta, el bahiense hizo un repaso por su nuevo disco, “revolución”, con “canciones de Amor” tal cómo él mismo lo definió hizo no me olvides y Aventura, entre otras nuevas canciones.
Además de temas clásicos Pintos, demostró por qué hoy es una de las mejores voces de la música popular argentina.
ya en la conferencia de prensa previa había mostrado un grado de relajación que trasladó luego al escenario, simple, sencillo dejó una impresion que sólo da la” buena gente”.
Por otra parte el extenso show, también tuvo momentos de mucha energía como cuándo sobre el final interpretó “Aleluya” de León Gieco, una canción que requiere una potencia interpretativa que sólo Abel Pintos y sus impecables músicos tienen.




miércoles, 9 de enero de 2013

Entrevista con Abel Pintos, que canta esta noche en Malargüe


Decir que la temporada de festivales de verano se viene con todo tiene otro tenor si hablamos de Abel Pintos. El músico nacido en Bahía Blanca, Buenos Aires, dará 50 recitales en dos meses y medio. De lejos, parece una labor titánica, pero para él no es más que la tarea para la que se preparó toda su vida.

Dispuesto deleitar con su voz y carisma esta noche en la Fiesta Nacional del Chivo, en Malargüe, el músico nos atiende desde las oficinas de la productora Dharma, en Buenos Aires, y brinda una charla amena sobre su presente y nuevo el año. En 2013 quiere grabar un nuevo disco y volver a salir de gira.

Pero a medida que transcurre la conversación, es igual de interesante escucharlo hablar de todo lo que quiere hacer a futuro. Entre sus proyectos están actuar, producir a otros músicos y hasta escribir un libro, aunque si hay algo que Abel Pintos entiende es eso de no apurar el presente y por ello repite con calma: “Más adelante, cuando tenga el tiempo, lo haré”.

Sorprende su mentalidad en una época en la muchos buscan conquistarlo todo ya, en “cinco minutos de fama”.

El hit prestado: Cactus
–Tuviste un año excelente en lo profesional. ¿Te sorprendió la rotación que tuvo en las radios Cactus? Porque todavía sigue sonando...
–La verdad que sí, porque después de muchos años usé una canción que no era mía como corte de difusión de un disco. Para un artista, el corte de difusión es algo muy significativo porque es la carta de presentación de lo que después resulta el resto del disco. Hacía varios años que esa canción siempre era de mi autoría, pero poder crear de una canción de otro autor un clásico propio es muy difícil. Por eso me sorprendió y me puso muy contento lo que pasó con Cactus.

–¿Te quedó el gustito por hacer otro disco con canciones de otros artistas? Porque debe haber muchas canciones que te gustan y que te encantaría grabar...
–No me quedó como materia pendiente porque cuando empiezo a pensar en un disco, compongo canciones porque puedo hacerlo y a veces, siento que hay canciones de otros autores que pueden complementar el mensaje que mis canciones apuntan a transmitir. Cuando pasa eso, simplemente la elijo y la interpreto. Ahora estoy componiendo y es lo que me gusta.

Armar las valijas para la ruta
–Estás embarcado en una gira muy fuerte hasta marzo, ¿cómo te preparás para dejar tu casa y salir a la ruta?
–Cuando se trata de giras muy largas como esta o como la que viví con Sueño dorado, siempre tengo una preparación física y vocal muy intensa, porque canto muchos días seguidos y tengo que estar preparado. En este caso, entre enero y marzo, vamos a hacer 50 conciertos, entonces entre los shows y los viajes tengo que prepararme. De hecho, la preparación física es muy cercana a la que realiza un deportista frente a un evento importante. Trabajo con nutricionistas, gente que se encarga de que haga deporte y gente que me ayuda en lo vocal. También trabajo lo espiritual, porque somos un todo y frente a tanta intensidad, tengo que tratar de estar preparado lo mejor posible.

–¿Cuando salís de gira, qué es lo que no puede faltar en tu valija?
–Libros.

–¿Y esta vez cuáles elegiste?
–Como en esta gira hago algunos shows, vuelvo a Buenos Aires dos o tres días y después vuelvo a salir, ando llevando de a dos. Los últimos dos que leí fueron De qué hablo cuando hablo de correr y Tokio Blues. Ahora, cuando salga de nuevo, antes de armar la valija, tendré que ponerme a elegir otros de la biblioteca.

–Siendo que sos un ávido lector, ¿has pensando en escribir un libro?
–Me encantaría realmente y alguna vez seguro lo voy a hacer, pero necesitás tiempo para eso. De hecho, en De qué hablo cuando hablo de correr se hace un puente entre lo que es la preparación física antes de una maratón con la preparación previa para escribir un libro. Sé que hoy no tengo ese tiempo disponible, pero alguna vez cumpliré esa fantasía.

Es tiempo sólo del nuevo disco
–Estás embarcado en la preproducción del sucesor de Sueño dorado...
–Tenemos pensando editarlo cerca de octubre de este año. Entre abril y agosto no voy a dar recitales, voy a tomarme un mes y medio para descansar y después empezaré a grabar el disco nuevo. Por ahora, estamos pensando en las canciones y el mensaje.

–¿Te proponés algo en particular con este nuevo trabajo?
–Va a ser un disco que va a marcar cosas nuevas y tiene como propósito seguir sorprendiendo tanto al público como a mí mismo, tanto en los conceptos musicales, como líricos y de interpretación.

–Hace un tiempo dijiste que te gustaría actuar, ¿te llegaron propuestas?
–Sí, he tenido propuestas, pero creo que a cada cosa que quiero desarrollar, quiero dedicarle su tiempo, no hacerla porque sí nada más. No me gusta correr porque sé caminar (risas). Prefiero hacer las cosas con tiempo y hacer algo que esté a la altura de la circunstancias.

–También dijiste que tenías ganas de profundizar la faceta de productor musical, ¿has podido?
–Sí. Estoy encaminado y te repito, estoy buscando los tiempos. No estoy abocado a ningún proyecto, pero sí estoy recibiendo cosas y ofreciendo consejos a músicos que conozco, que admiro mucho y que tienen la amabilidad de contar conmigo a la hora de cerrar ciertas decisiones.

–Incluso, tenías la idea de trabajar con un mendocino, Sebastián Garay...
–Sí. Seguro que en algún momento vamos a hacer algo juntos. Algún día voy a estar del otro lado de la pecera o del otro lado del disco con él porque es un artista que admiro mucho y que, creo, tiene mucho potencial para desarrollar.

–Veo que la palabra clave en tu vida es “tiempo”. Te gustaría tener más tiempo para hacer todo lo que querés...
–No es que busque tiempo, sino que entiendo a qué cosas le quiero dedicar tiempo y cuándo. Porque no considero que haya más tiempo que el que estamos compartiendo vos y yo en este momento. No quiero acaparar tiempo hacia adelante.

–¿Qué música estás escuchando?
–Estoy disfrutando mucho de los discos solistas de Mark Knopfler, el cantante de Dire Straits, y estoy encantado. Además, estoy escuchando mucha música country, como Crosby, Still & Nash. Estoy descubriendo a Paul McCartney en su etapa solista y a Prince. Estoy conociendo cosas clásicas, que yo no había escuchado.

El soltero más codiciado
–Bueno, vamos a lo importante. ¿Cuándo te vas a ponerte de novio?
–(Risas) Todavía no.

–¿Si te pusieras de novio, se lo dirías a una periodista?
–Sí. Siempre digo lo mismo: voy a hablar de mi vida privada en ese sentido el día que yo sienta que he transcurrido un tiempo prudente al lado de una persona de la que yo pueda hablar como parte de mi vida. En definitiva, soy joven y vivo muchas experiencias y aprendo, pero hablar de cada experiencia sería como malgastar esa energía de intimidad. Voy a hablar más abiertamente de temas como este cuando sienta que estoy viviendo una historia de verdad.